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La Llacuna, arciprestazgo de Piera-Capellades, diócesis de Sant Feliu de Llobregat (ver en el mapa). CG, legajo 1674, exp. 3, folios 163-167. El regente Luis García Bros Comas, escribe el 18 de abril de 1941 con sello de Parroquia de Santa María de La Llacuna y encabezando cada folio con SALUDO A FRANCO (izquierda) y ¡ARRIBA ESPAÑA! (derecha), que respecto a "personas de quienes conste que la causa inmediata de su muerte fue su marcada significación religiosa o de Acción Católica", "NO HA LUGAR, por no haberse dado ninguno de los casos que se solicitaban."

Respecto al segundo extremo: "En este término parroquial fue asesinado el día 11 de abril de 1938 el joven de 25 años FRANCISCO SENDRA GOMA, soltero, hijo de José y María, quien hallándose emboscado por no querer servir en el ejército rojo fue visto por una patrulla de milicianos y al darle el alto y no pararse hicieron fuego contra él y cayó muerto.

Igualmente el día 20 de enero de 1939 unas horas antes de la llegada de las Tropas del Generalísimo FRANCO, fue sacado violentamente de su casa donde estaba escondido y apareció asesinado JAIME MARIMON OLIVELLA, casado, de unos 32 años de edad, hijo de Daniel y de Carmen, el cual si bien era un ferviente católico, se ignora por qué causa fue asesinado, siendolo en pleno bosque y sin testigos del hecho.

Los dos de familias católicas y cristianas, se ignoran otros detalles de su muerte, así como la causa de sus asesinatos, aunque es común sentir que no lo fueron por ser católicos."

Tercer punto: "En esta demarcación parroquial no existía convento alguno y sí el templo parroquial de La Lacuna y San Pedro de Mayer sito en este término municipal y la capilla de San Antonio, y la del caserío de Baltá.

La parroquial de La Llacuna el día 24 de julio de 1936 por la tarde fue asaltada por un centenar de personas forasteras, las cuales obligaron al vecindario a destrozar todos los objetos de culto, imágenes y un altar de madera tallada, ornamentos, armonium y cargandolo en unos camiones llevado en despoblado donde prendieron fuego y lo quemaron reduciendolo a cenizas.

Calculo que los perjuicios causados en el templo ascienden a unas 60.000 Pts. En el edificio que más tarde sirvió de almacén y sindicato unas 15.000 Pts.

En la iglesia de San Pedro de Mayer prendieron fuego dentro de la misma, por cuya causa sufrió desperfectos considerables el edificio que no quedó en ruinas pero sí muy deteriorado, calculando un perjuicio de unas 75.000 Pts. Los ornamentos y objetos de culto 30.000 Pts.

En la capilla de San Antonio sacaron fuera lo poco que había y lo quemaron, o sea la imagen del santo y su altar. Siendo el perjuicio de unas 10.000 Pts.

En la capilla del caserío de Baltá sacaron cuanto en ella había propiedad de Don José Belza y lo quemaron, calculando en unas 10.000 pts su perjuicio.

Estas cantidades están en desacuerdo con las facilitadas por el ayuntamiento, quien no se tomó la molestia de preguntar sobre el particular e informó sin preocuparse de estudiar lo que desconocían."

Profanaciones: "En la parroquial de La Llacuna fueron profanadas y destruidas las imágenes del Santo Cristo, Inmaculada, Virgen de los Dolores, Sagrado Corazón de Jesús, Virgen del Rosario y del Carmen y algunas otras, que fueron destruidas al ser tiradas de los altares.

En la iglesia de Mayer, por el motivo de estar en una capilla lateral una venerada imagen del Santo Cristo de mucha devoción en la comarca, se salvó del primer incendio que tuvo lugar el 24 de julio de 1936 y unos días más tarde se presentaron otros desalmados para completar la obra de los anteriores.

Ataron una cuerda al cuello de la imagen y a pesar de tirar con fuerza varios hombres no lograron derribarla.

La escarnecieron e insultaron y habiendo amontonado leña y objetos combustibles le prendieron fuego hasta reducirlo a cenizas.

En la capilla de San Antonio sacaron la imagen del santo y después de arrastrarla le prendieron fuego juntamente con el altar y objetos propios del culto.

Iguales métodos de profanación siguieron en la capilla del Manso Baltá.

Las Sagradas Especies no fueron profanadas en ninguna de las iglesias por haber sido retiradas a tiempo, por sus respectivos custodios."

Quinto extremo: "Cuando las turbas se presentaron en La Llacuna al objeto de quemar el templo parroquial, encontraron oposición en los dirigentes de la localidad, diciendo que corrían peligro las casas contiguas y en vista de ellos respetaron algunos altares causandoles destrozos y cargandolos en camiones lo trasladaron en despoblado y lo quemaron.

Otros entraron en la casa rectoral y la saquearon en sus ropas, vajilla, cubiertos y cuanto les gustó. Mientras tanto unas mujeres con el puño de sus pistolas hicieron añicos todos los cristales y los muebles y libros saltaron hechos pedazos por los balcones y ventanas y cargado juntamente con lo de la iglesia, quemado en despoblado. En la casa rectoral existía un altar que servía de oratorio y fue igualmente destruido.

Estaba al frente de la parroquia el infrascrito cura regente Rdo. Luis Gª Bros Comas pbro, siendo perjudicado en unas 50.000 pts.

La casa rectoral sufrió perjuicios calculados en unas 3.000 pts.

En la casa rectoral de Mayer, al cuyo frente estaba el Rdo. José Rodrigo, en la actualidad residente en Barcelona. Le fueron saqueados los muebles destrozandolos y causandole un perjuicio de unas 30.000 pts y de unas 5.000 pts en la casa rectoral."

El expediente de La Llacuna en la CG -legajo 1592, exp. 13- muestra que hubo otros asesinatos, pero no recoge para ellos motivación religiosa:

1592 13 03

3

1592 13 05

5

1592 13 07

7

1592 13 08

8

1592 13 18

18

1592 13 19

19

1592 13 23

23

1592 13 24

24

1592 13 25

25

1592 13 26

26

1592 13 27

27

1592 13 28

28

1592 13 36

36

1592 13 37

37

1592 13 38

38

1592 13 57

57

1592 13 63

63

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(Volver a Sant Feliu de Llobregat.)

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